Desde el 19 y 20 de enero, en Asamblea con mas de 300 participantes, votamos la Movilización del 27 –F y la decisión de avanzar en la Asamblea Nacional de los Movimientos Populares. Desde esa fecha hasta ahora hemos estado en Asamblea Permanente, reuniéndonos casi semanalmente. Hemos militado y seguiremos militando con los mandatos de la Asamblea de enero, con nuestras diferencias, pero convencidos de articularnos nacionalmente para garantizar las conquistas de este proceso, su profundización y, principalmente, para colocar en su justo sitial el protagonismo del Pueblo Bolivariano, sus Luchas y su potencial poder de control social en la continuidad de este proceso que tuvo su parto en ese corte histórico que significó el 27-F del año 1989.
Sabemos que este espacio de construcción, la Asamblea Popular Revolucionaria de Caracas, nacida previa a las jornadas del 11 y 13 de abril del 2002, han tratado, inmerecidamente, de debilitarlo. Al calor de esa jornada revolucionaria nació la página de aporrea.org, orgullosamente marcada por la irreverencia, la confrontación y por la lealtad a la disposición de cambio del Pueblo Bolivariano: alma y motor de un proceso revolucionario aún en curso, pero sometido a peligros que tienen su razón de ser en esa perversa lógica del capital, aún imperante, que horada hombres y mujeres del proceso y que hace más difícil el cambio de las relaciones sociales de carácter capitalista predominantes.
Marchamos este 27 con la fortaleza de los muchos que hacieron suya esta convocatoria. Las organizaciones, sectores e individualidades que allí estuvimos cargamos con toda la historia y todos los caídos en esta etapa de luchas recurrentes, llena de victorias, irreverentes, testarudamente resueltos a cambiar el mundo, emulando la profunda voluntad de cambio del pueblo transcurrida en estos 19 años.
Marchamos con las consignas aprobadas: ¡Unidos contra la agresión imperialista! ¡Contra la canalla opositora! ¡Contra los Burócratas y Corruptos!, la emblemática del 27F: ¡No hay Pueblo Vencido!, la también histórica de la Asamblea de Barrios: ¡No queremos ser gobernados, queremos gobernar! y la que apunta a la articulación: ¡Hacia la Asamblea Nacional de los Movimientos Populares!
Y lo hicimos sin objetar el liderazgo de Chávez que como pueblo se lo hemos delegado, lo hicimos en solidaridad con los 15 mil trabajadores de SIDOR que están en un justo conflicto y a las puertas de una paralización de la empresa, marchamos para incentivar los inobjetables reclamos que existen en el sector público, obreros y empleados con dos años de retardo contractual, la exigencia de emergencia en el sector salud, las luchas del sector campesino e indígena, marchamos, en fin, por todas nuestras luchas que son las luchas de todos. Marchamos en correspondencia con esa fina intuición de los que estuvieron en Miraflores, inmediatamente después del revés del 2D y quienes le gritaban a Chávez: ¡LIMPIEZA… MÁS REVOLUCIÖN!
Sabemos que este espacio de construcción, la Asamblea Popular Revolucionaria de Caracas, nacida previa a las jornadas del 11 y 13 de abril del 2002, han tratado, inmerecidamente, de debilitarlo. Al calor de esa jornada revolucionaria nació la página de aporrea.org, orgullosamente marcada por la irreverencia, la confrontación y por la lealtad a la disposición de cambio del Pueblo Bolivariano: alma y motor de un proceso revolucionario aún en curso, pero sometido a peligros que tienen su razón de ser en esa perversa lógica del capital, aún imperante, que horada hombres y mujeres del proceso y que hace más difícil el cambio de las relaciones sociales de carácter capitalista predominantes.
Marchamos este 27 con la fortaleza de los muchos que hacieron suya esta convocatoria. Las organizaciones, sectores e individualidades que allí estuvimos cargamos con toda la historia y todos los caídos en esta etapa de luchas recurrentes, llena de victorias, irreverentes, testarudamente resueltos a cambiar el mundo, emulando la profunda voluntad de cambio del pueblo transcurrida en estos 19 años.
Marchamos con las consignas aprobadas: ¡Unidos contra la agresión imperialista! ¡Contra la canalla opositora! ¡Contra los Burócratas y Corruptos!, la emblemática del 27F: ¡No hay Pueblo Vencido!, la también histórica de la Asamblea de Barrios: ¡No queremos ser gobernados, queremos gobernar! y la que apunta a la articulación: ¡Hacia la Asamblea Nacional de los Movimientos Populares!
Y lo hicimos sin objetar el liderazgo de Chávez que como pueblo se lo hemos delegado, lo hicimos en solidaridad con los 15 mil trabajadores de SIDOR que están en un justo conflicto y a las puertas de una paralización de la empresa, marchamos para incentivar los inobjetables reclamos que existen en el sector público, obreros y empleados con dos años de retardo contractual, la exigencia de emergencia en el sector salud, las luchas del sector campesino e indígena, marchamos, en fin, por todas nuestras luchas que son las luchas de todos. Marchamos en correspondencia con esa fina intuición de los que estuvieron en Miraflores, inmediatamente después del revés del 2D y quienes le gritaban a Chávez: ¡LIMPIEZA… MÁS REVOLUCIÖN!
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